UN GUELO PA´NO´LVIDAR

Jue pa´fin de los cincuenta,
o quizá, en los sesenta,
qem´prendimos nuestro viaje
con muy poco equipaje,
pa´darle guelta singular
y al territorio visitar
en pleno tiempo e´invierno
más rogándole al eterno
buenaventura pa´terminar.

Irizarri de piloto
con Fernández a su láo,
por las comunas,Don Romo
entusiasta´decir como,
Molinari,el poco oído
lamentó el haber subido
Pedemonte y Coletto
formamos un sexteto,
un puñáo e´poseidos.

La joda hubo arracáo
al alba de cierto día,
más uno qe´no podía,
jue Coletto alergizáo.

Al día siguiente seguimos
con no poca impaciencia,
dejabamos la querencia
muy cerquita, sobre la ría
el avión ya no subia
con el tren todo abajo
retornamos con trabajo
sin palabras, ni qe´decir,
ni comentario compartir,
juimos todos al carajo.

Por la tarde insistimos
hasta el Coyle ya volamos
pero al poco lamentamos,
el hielo en las alas tener,
áhi nomas girar y golver,
parecía cosa e´mandinga,
no nos gustaba ni minga
el comienzo accidentáo
mirabamos de costáo
el perfil de la restinga.

Tercer día por la tarde
con escala en Piedrabuena,
volando bien y sin pena,
entre nubes relucientes,
meta risa en nuestros dientes,
el"Biscraf",raudo nos llevó
y suavemente se posó
en el campo de Deseado,
muy lisito y bien marcado
qe´muy tranquilo nos dejó.

Buscabamos los solares
pa´las nuevas construcciones
con muchas conversaciónes
a los jefes comunales.
No contaban los anales
con mesejantes gestiónes.

Puerto Deseado, hermoso,
con sus rocas engarzadas
y sus calles empinadas
mirando hacia el mar grandioso.

Nevando el fin de semana,
un cordero saboreando,
el vinito paladeando,
especial pa´los guatones,
nos quedamos dormilones
sin pensar seguir volando.

El lunes, con sol arriba
y un frio congelante
ecaramos muy campantes
pal´campo e´aterrizaje,
! Ahi mamita qe´abordaje¡
de nieve el avión tapáo,
ni cubierto, ni emponcháo,
calentamo los motore,
hasta pronto a los señore,
yas´tabamos arrancáos.

Carreteando con esfuerzo
el "Biscraf" de pronto subió
y la trompa´l cielo apuntó,
más no acababa e´subir,
Don Irizarri al alventir,
la peligrosa situación,
quiso equilibrar el avión,
mando a todos a cabina
y volando cual gayina
comenzó a dar el gran vueltón.

La cosa se puso espesa,
con un cagaso de aquellos,
se pararon los cabellos,
con balance inestable,
y un piloto formidable,
el avion golvió a las pistas,
con las jetas...no de artistas
descendimos palidones,
sin esperar ovaciones
ni acordar entrevistas.

El qe´e´nada sen´teró
jue Molinari, el poco oído,
su oreja no habia alvertido,
lo grave e´la emergencia
pues no hizo comparencia
adelante´n la cabina,
ni llamáo con bocina
podría´berse escucháo,
l´avion iba e´costáo
y el pasaje cual sardinas.

Estupor en las priguntas,
¿Que demonio habia pasáo?
!alerones escarcháos¡
nos salvamos de pedito
Santacruceño es Diosito,
nos junamos alarmáos.
Hicimos la dehielada,
con una triste pavita,
yenando agua poquita
qe´no alcanzaba pa´nada.

Y al fin remontamos güelo,
Con rumbo a Caleta Olivia,
la cosa venia más tibia
y pretendimos descender,
caray, jue cosa e´no creer
en el campo un metro e´nieve,
mijor montarse un Congreve
y andar a salto e´mata
pa´evitar meter la pata,
a volar si no se debe.

En Truncáo la mesma cosa,
pa´Las Heras enfilamos
y al fin a un campo bajamos.
El terreno pal´hospital,
nos agenciamos sin igual,
hicimos las deligencias
con ganas ya de querencias,
cuando todo terminamos
pa´Perito nos rajamos.

Agobiante estas gueltas,
a pesar de los aviones,
fueron muchos sofocones
pa´conseguir cumplimentar
y en esacaso tiempo arrimar,
un gran caudal e´información,
pa´comenzar la proyección
e´las obras provinciales,
qe´por distintos causales
concentraban tod´atención.

Mesma rutina en Perito,
censo e´lotes y servicios,
sin ningún tiempo pa´vicios,
unos temas e´legales,
y otros tantos comunales,
por la tarde...!Un resquicio¡

Ahí nomás aprovechamos,
un güelito hasta Sarmiento,
muchas nubes y sin viento,
a una prima casadera
con melicos de carrera,
me aparecí...como un cuento.

Saludos con despedidas,
tiempo pa´más ,no alcanzaba,
el avión se nos piantaba
yegamo jadeando al campo,
por entre matas brincando,
el viento se habia cambiáo
y el paseo termináo,
volando entre cañadones,
cortando clavo a montones
el piloto habia rumbiáo.

yegamo con lo justito,
al rato el campo cerró,
la niebla todo cubrió,
zafamos por un ratito
de quedar enganchaditos,
la nave a Perito golvió.

Situación pa´drenalinas,
poco apta pa´ infartáos,
den´selás a condenáos
y no ha paisanos corrientes
con lecencias e´decentes,
qe´priestaban un servicio
a costa e´un sacreficio,
sin pensar las consecuencias
y cumplir con sus presencias,
prometidos beneficios.

Espero qe´otro gaucho,
me arrime con su memoria,
todo el resto e´historia,
pa´completar el trayecto
no se crean qes´toy perfeto,
tengo unas flor de lagunas
pero qe´joder...ahijuna,
yo ya me he guelto viejo,
ni lo pensamos parejo,
ni le achunto en más de una.

Con veitisiete pirulos,
envidio al qe´los tuviera,
me ricuerdo cuando era
un mozo brioso y dem´puje,
ya los guesos se me crujen
y pa´una vida cualquiera.

Pero pueden imaginar,
la juerza del optimismo,
más, no hacer siempre lo mismo,
empeñáos en la solución,
nos largamos en el avión,
un "Biscraf",segunda guerra,
bastante gauchito era,
pinton e´color celeste,
volamos al campo agreste
sin una queja siquiera.

Y al fin me yega rijuerzo
d´este extendido evento,
Edelcio se trae su cuento,
yo le doy el tratamiento
con las reglas de Sarmiento,
pa´darle mijor acento.

Parece qe´de Perito,
pal Calafate rumbiamos,
a Gregores...¿lo puentiamos?
Yo rastreo en mi moyera
cualquier ricuerdo qe´juera,
sin poder cantar victoria,
se me pianta linda hestoria,
o se mistura con otras
de aquellos tiempos patriotas,
olvidáos en la memoria.

Asigun me ricordaron,
el Glaciar sobrevolamos,
al moreno admiramos,
su belleza refulgente,
qe´años dispué harta gente,
del mundo entero se llegan
y en multitud se congregan
acechando su rotura,
pa´mirar tal hermosura
de los hielos en rompiente.

Y terminando la güelta,
a Gallegos ya llegando,
frente e´tormenta aterrando
volamos más qe´bajito,
nos hicimos chiquititos
pa´entonces poder esquivar
y tranquilos aterrizar,
en el campo de Río Chico,
hoy pal´güelo ya me achico
aunque harto guste volar.

Y el tal frente e´tormenta
al flaco Carrizo pescó,
pal´Atlantico derivó
al pequeño monomotor,
qe´con mucho esfuerzo y valor
al campo al fin llegaron
y ahí nomas se relajaron
de tanto esfuerzo y tensión,
hay qe´tener gran corazón,
pa´guantar lo qe´volaron

En un hangar de Río Chico,
unos cuantos años dispue,
arrumbáo y en maltreches,
vide al bimotor querido,
ya muy viejo y muy herido
esa jue la ultima vez.

Vos tambien tendrás tu hestoria,
no solamente conmigo,
juimos nosotros amigos
de alguna monta cualquiera,
más ricuerda cuando eras
muy fortacho y roncador,
ricordarás del aviador,
su condición tan segura
jue volarte una hermosura
y en Santa Cruz lo mijor.

Y termino este cuento,
qe´mem´pleó un rato largo,
nada digo en mi descargo,
por si algún hecho fallido,
o cierto dato no incluido.
Pido a todos me dispensen,
qe´ricuerden y lo piensen,
aquellos tiempos de otrora
y comparen los de ahora,
por si encuentran parecido.

MARTIN FIERRO (gonzalez)